El verano ya ha terminado pero no quería pasar por alto las imágenes de la cosecha de tomates que mi padre ha criado en la vega granadina, más concretamente en la Zubia.
Con unas 50 matas de tomate sembradas la cosecha este año ha superado de largo los 1300kg. Aún no los ha arrancado aunque la producción ya es escasa y no de tan buena calidad como lo ha sido durante todo el mes de agosto y primeros de septiembre. Desde aquí quiero hacerle un homenaje a mi padre y a todos esos agricultores que se esmeran en obtener unos buenos productos para que luego todos disfrutemos de ellos. Estoy seguro que han sido muchos los granadinos que han probado el sabor exquisito que tenían estos tomates al adquirirlos en distintos establecimientos de la ciudad...